La Rambla se vacuna para que su reforma acelerada no la colapse

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Una de las primeras decisiones de Jaume Collboni como alcalde fue reducir la duración de la reforma de la Rambla más o menos a la mitad de lo previsto, haciendo en 32 meses (menos de tres años) lo que el plan que arrancó en el anterior mandato estimó terminar en 72 (seis años). Este ajuste, que está a punto de aplicarse, incrementa sobremanera la complejidad de una actuación que ya era altamente sensible puesto que supone poner patas arriba el más mundialmente conocido de los paseos de Barcelona. Y más a puertas de un verano que se espera sea de récord en cantidad de turistas, que sí o sí visitarán este eje.

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