¿La culpa es de Colau?

<![CDATA[

Tanto el PSC como ERC respiraron aliviados tras el voto contrario de BComú al presupuesto del Ayuntamiento de Barcelona. Fue un alivio para ambos porque un voto afirmativo les hubiera puesto en aprietos. Para el PSC hubiera sido un contratiempo porque les obligaba a abrir una negociación para la entrada de BComú en el gobierno que no les apetece en absoluto. Los socialistas son reacios a reeditar el pacto con los comunes mientras esté la exalcaldesa Ada Colau en el Consistorio. La relación es mala, y la competencia por el liderazgo en el Ayuntamiento que habría entre el alcalde Jaume Collboni y Colau sería feroz. Así que la oposición de BComú al presupuesto fue, en el fondo, una buena noticia porque lo contrario les hubiera forzado a un ejercicio de dialéctica creativa y funambulista para dilatar un indeseado acuerdo con los comunes.

Seguir leyendo…

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *