<![CDATA[
El auge de la ultraderecha centra la campaña de las elecciones europeas. Las encuestas avalan esta preocupación cuando indican que los partidos de la extrema derecha pueden ganar o sacar un gran resultado en más de la mitad de los países de la UE. Estos partidos dieron un serio aviso hace cinco años y ahora podrían dar la campanada. ¿Qué se ha hecho en este lustro para contrarrestar el discurso ultraderechista? Poco o nada, a tenor de las respuestas de los ciudadanos en los sondeos. ¿Los votantes que optan por esas formaciones son bobos, retrógrados, manipulables, ciegos o insensatos? No. Entonces, ¿por qué votarán a esos partidos? Esa es la pregunta que debe responder el resto de las candidaturas que han ejercido el poder y que ahora se desgañitan alertando de la llegada de una ola extremista.